viernes, 20 de enero de 2012

Sueños montados en barrilete

Era tarde. Anochecían sus días. Se había equivocado tanto…Ya no podía remediarlo. Hacía tiempo que la tristeza ocupaba el palco principal de su existencia. Desperdició su vida. El alcohol le arrancó lo más importante que tenía. El lo permitió. No supo hacer otra cosa. ¿Debilidad? ¿Cobardía? En su mente había repasado su vida una y otra vez, como esas películas viejas de proyector, adelante, atrás, pausa, y otra vez atrás. Marta le decía que era muy duro consigo mismo. Es que Marta era demasiado buena, a ella le debía el estar vivo, rescatándolo de ese interminable abismo. Nunca le escuchó un reproche, ni en sus peores momentos. Era como una manta que abrigaba su largo invierno…
Se sentó en el banco de la plaza, un cielo azul lo invitó a  recordar… Se vio a si mismo, muchos años atrás con su hijo, remontando barriletes que ellos mismos habían armado. Herencia del abuelo, le había explicado a su hijo, el me enseñó a mi y yo ahora a vos. Es lo único que le dejó a su hijo, el recuerdo de una infancia feliz. Después desapareció persiguiendo no se que cosa que jamás encontró… Los reproches lo aturdían. Si quiso dejar a Mercedes, ¿por qué dejar también a Martín? Quería a su hijo más que a nada en el mundo, su error había sido no saber separar las cosas. Ahora lo sabía, pero era demasiado tarde para reparar algo…
Volvió a levantar la vista al cielo, maravillado como antes, subyugado por el vuelo de un barrilete que parecía devolver el tiempo atrás. Hasta le parecía escuchar las risas de el y de su hijo.
-Abuelo me ayudas?
Un nene de unos cinco años parecía hablarle desde el pasado, extendiéndole el hilo del barrilete para remontarlo. Unos pasos más atrás estaba su propio hijo, sonriéndole…

14 comentarios :

  1. Jo,qué bonito final,Gamyr.
    Me encanta pensar que todo tiene solución,que el odio o el rencor y tantos sentimientos funestos más,pueden ser disipados por el amor incondicional.
    Preciosa historia.
    Besos.

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  2. El final es espectacular.
    Pero no siempre es tan fácil aparcar el pasado, sobre todo para la persona que ha sufrido el abandono.
    Un abrazo, GaMyr

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  3. Hola Gamyr
    Me gustó mucho tu historia con final feliz.Pero en la vida real no todos los finales son asi...lamentablemente
    Besos

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  4. No siempre es asi Marinel, pero vale la pena mantener la esperanza.
    Besos

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  5. Claro que no es fácil Juglar, pero al menos si se aprende a perdonar hay una segunda oportunidad.
    Besos

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  6. En la vida real hya algunos finales felices.
    Besos Di.

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  7. El corazón, en algún lugar, siempre guarda historias de abandonos o de extremo gozo en la niñez; polos completamente opuestos donde no hay grises.
    Me gusta el final, aunque ya lo han dicho (eso me pasa por no aparecer de primera jaja)
    Besos Gamyr

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  8. La niñez nos marca de alguna manera, es asi. Me alegra saber que te ha gustado VivianS sin importar el lugar.
    Besos :)

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  9. Ay, la niñez... ¡qué etapa tan bonita!.
    Me fascinó el final.
    Un beso por una historia maravillosa.

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  10. GaMyr:

    Evoca, nos evoca mucho tu texto por ese descender o ascender (vaya a saber alguien para que lado vamos en este mundo físico!) a nuestro ser interior, que sí, una vez ha sido niño. Creo mi vida no ha sido lo más responsable que desearan algunos y algunas, esto al tenor de ese niño que en mí nunca pudo dar paso al adulto negativo y codicioso: exhibo mi idealismo niño, todo es posible en mi mente y nunca veré un viejo ante el espejo porque este espíritu es inmortal y ha quedado prendado de ese niño humano que fue mi cuerpo un día...

    Esto cavilo provocado por tu bella y profunda historia en esta tarde ventosa y calurosa en "Náralit", mi pubelo del norte de Costa Rica.

    Abrazos fraternos en Amistad y Poesía verdaderas,

    Frank Ruffino

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  11. Frank, es muy bello mantener vivo ese niño que alguna vez fuimos.
    Gracias por tu visita.

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