En el marco del proyecto Adictos a la escritura escribí este relato que responde a la consigna de utilizar una frase (marcada en el relato en rojo) propuesta por otro participante
Estaban todos reunidos. Hacía meses que se venía organizando todo. Algunos llegaron desde
lejos, viajando varios días. Cada personaje tenía algo que decir, noticias que contar. Sus historias no habían terminado, o si. Es decir, todas tenían un final, para el público, luego ellos seguían sus vidas. Por eso era necesario actualizarse, pero todos hablaban al mismo tiempo generando gran alboroto.
Susana, la peluquera contaba, con su voz aguda, más aguda que de costumbre por la gran excitación que sentía, que el vecino la acosaba y ella ya había llamado a la policía, pero esto no logró amedrentarlo. Sus grititos se entremezclaban con la voz grave de Osvaldo que contaba su decimocuarto intento de suicidio.
El escritor los miraba a todos, con las gafas en la punta de la nariz, los cabellos grises revueltos. Estaba maravillado, todos sus personajes habían cobrado vida, más allá de él. Cualquiera pensaría que estaba loco, bueno, tal vez un poco, pero no al punto de inventar lo que veía con sus propios ojos.
Sor Inés y la madre Superiora habían tomado la precaución de mandar a construir un altar antes del encuentro. Estaba adornado con velas y flores silvestres muy coloridas que perfumaban el ambiente. Alguien dijo que parecía el altar de la primavera, unos cuantos rieron con la ocurrencia, menos las religiosas que se miraron circunspectas meneando la cabeza severas.
Marcos y Sandra que se habían casado al final del libro tenían ahora cuatro hijos, uno más travieso que el otro, y vivían peleando, intercambiando acusaciones. Marta, que no había logrado separarlos, a pesar de sus múltiples intentos, reía satisfecha, mientras César le besaba el cuello.
El escritor quería hablar, siempre tenía algo que decir, pero esta vez se sentía abrumado. Conocía a todos y cada uno de ellos, los había creado, pero ahora tenían vida propia, y sus actos se le escapaban como agua entre los dedos.
Todos hicieron silencio de golpe. Esteban no había sido invitado. Grave error. Los papeles se mezclaron, su invitación se traspapeló, pero de algún modo se enteró y aquí estaba. Las mujeres le temían, Susana especialmente ya que había sido víctima de su lascivia. Los hombres lo respetaban, algunos hasta secretamente lo envidiaban. Las religiosas se santiguaron ante su presencia masculina y repulsiva.
El mago se acercó, sin que nadie se diera cuenta. Había logrado aprender trucos nuevos, y no había tenido demasiadas ocasiones de practicarlos. Este le pareció un buen momento. Los hizo colocar a todos alrededor del altar, la monja se sentía orgullosa e importante. Ella había tenido la idea, aunque la madre superiora quisiera ahora quedarse con todos los créditos. Sacó un conejo de la galera, palomas... Comenzaron a abuchearlo, querían algo nuevo, que los sorprendiera... Carraspeó y pidió un voluntario. Nadie se animó, hasta que Esteban haciendo gala de su hombría se acercó. Se hizo un gran silencio. Era un personaje temido, y él lo disfrutaba. El mago extendió su varita, invocó espíritus, ante el asombro de las hermanitas y de todos los presentes, un viento fuerte comenzó a soplar. De la nada apareció fuego, intenso, poderoso, rugiente, voraz. Y así, sobre el altar del tributo a la primavera, muere, convertido en polvo, el último sátiro del cuento.
Lo has hecho de lujo.
ResponderEliminarMuy bien eh!!!
Me ha gustado muchísimo.
Besos.
Gracias Toro ! Sos un dulce :)
ResponderEliminarBesos
No deja de ser paradójico que en un tributo mágico desaparezca la ofrenda a la magia. Maldita realidad. Un beso.
ResponderEliminarBuen trabajo, Gamyr, me ha gustado mucho tu relato ^-^
ResponderEliminar¡Un beso!
Estoy con el Toro, te quedó de lujo!!!!!
ResponderEliminarYo no podría haberlo hecho mejor.
Gracias, le diste vida y relato a una frase que llevaba guardada muchos meses sin que nadie se ocupara de ella...
Besos Gabi
Karras si vos lo decis...
ResponderEliminarGracias Elisa!
ResponderEliminarPufff, Novia que alivio que te gustó ! Tu frase me dejó varias noches sin dormir, jajaja.
ResponderEliminarBesos
Qué buena y diferente historia, amiga :) Sería genial que un personaje se pudiera materializar y vivir y ser feliz... siempre que no sea alguien como Esteban, porque madre mía.
ResponderEliminarY suena realmente bien lo de utilizar una frase de otro participante para escribir un relato.
Un beso :)
muy bueno, me encantó por la originalidad y le diste un cierre perfecto
ResponderEliminarbesos
Me gusto muchísimo.. y me sorprenden tus letras.. escribes muy bien...
ResponderEliminarBravo amiga..
Un beso
Un abrazo
Saludos fraternos...
Gracias Natalia. Si te gusta la idea puedes participar en Adictos a la escritura, todos los meses hay nuevas propuestas.
ResponderEliminarBesos
Gracias Lau :)
ResponderEliminarGracias Adolfo, lo intento :)
ResponderEliminarBesos
Interesante!!
ResponderEliminarPues la frase a mi parecer era bastante difícil de encajar, y lo has hecho muy bien. Un buen relato, muy original. Besos
ResponderEliminarQue bueno!!!!
ResponderEliminarUn abrazo
yo tambien pienso que la frase no era nada facil de encajar y tu lo has hecho a la perfección.
ResponderEliminarEl relato me ha gustado mucho, me ha parecido muy imaginativo, además que sería tremendo que los personajes de los libros cobraran vida....por un momento lo he pensado y se me han puesto los pelos de punta.
Mil besos, guapa.
Que buena historia lograste y que bien quedó la frase en su lugar!!
ResponderEliminarQue locura que nuestros personajes cobraran vida, necesariamente tendríamos que tener un altar cerca para hacer algún pacto!!jeje
Muy original, me encanto!!
besos
Interesante la trama, el final no lo tenia en cuenta XD. Abrazos y continua asi tu labor.
ResponderEliminarHola, GaMyr!!
ResponderEliminarMe gustó mucho tu relato, está muy bien construido.
Besos!
Gracias Dolly !
ResponderEliminarLa verdad hada es que me costó bastante con la frase que me tocó. Me alegro que te haya gustado.
ResponderEliminarBienvenida :)
Gracias Lapislazuli, , beso :)
ResponderEliminarTe imaginás? Sería un verdadero alboroto.
ResponderEliminarBesos Metamorfosis :)
Si Patricia, sería muy necesario.
ResponderEliminarGracias por los elogios.
Besos
Gracias Plekito, que bueno que te haya sorprendido.
ResponderEliminarGracias Maga :)
ResponderEliminarMe encantan esos ejercicios de escritura. Yo también suelo hacerlos en el taller que ahora mismo tengo entre manos. A tí te ha quedado de lujo.
ResponderEliminarUn abrazo
Aunque a todos los escritores les gustaría que en alguna ocasión sus personajes cobraran vida, en algunos casos hay que dar gracias porque solo sean letras en un papel. El protagonista de mi aportación al proyecto de este mes es un claro ejemplo, ¿no crees?.
ResponderEliminarBuen relato.
Un saludo
ibso
Gracias amig@mi@ !
ResponderEliminarSeguro Ibso, mejor que se queden en el papel ;)
ResponderEliminarUn saludo
Que perspectiva tan interesante!. Por un instante no me ubicaba hasta que el escritor con su cabello revuelto me trajo a capitulo. Casi me sentí observadora de todos esos personajes tan reales como irreales. Estupendo!
ResponderEliminarGaMyr: Tu cuento me hizo imaginar que pasaría si los personajes que he creado con mis letras, de pronto se me aparecieran. De seguro me reclamarían lo que he hecho con ellos. ¡uy, ya me dio miedo!
ResponderEliminarMuy original tu escrito y bastante fluido.
Felicidades: Doña Ku
Con más magos así se arreglarían muchas cosas y desaparecería todos los sátiros,. Pero morirían los cuentos si todo es felicidad. Digo
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por visitarme y comentar
Gracias Nyra y bienvenida !
ResponderEliminarDora Ku parece que a varios se les dio por pensar lo mismo ! Sería un desastre.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Mejor que no mueran los cuentos, que sería de nosotros?
ResponderEliminarUn beso Daniel
muy chulo y original (vaya frase, Novia XD)
ResponderEliminarGracias Debora ! (Viste que frase me tocó? sencillita, jajajaja)
ResponderEliminarBesos
Me gusta tu forma de escribir, creo que cada día veo a más buenas escritoras (ojo, independiente si tienes libro o no, desde el momento que escribes para mí, eres una escritora), te has lucido con tu relato, eres orginal y qué bueno que fue el proyecto de este mes, todas tuvimos grandes retos que supimos aprovechar. Me gustó tu relato querida.
ResponderEliminarFelicitaciones~
Muchísimas gracias Rossiel, y bienvenida!
ResponderEliminar¡Muy bueno! Era una frase no muy fácil de comprender y la has sabido desarrollar acorde con el relato sin que sobrase ni resultase extraña.
ResponderEliminarSin darme cuenta, me puse a pensar en mis propios personajes y me pregunté qué pensarían de la vida que les doy.
¡Me ha gustado!
¡Un beso!
Gracias Osnolasaga, la verdad es que la frase no era nada sencilla y me costó bastante encontrarle sentido. Me alegro que te haya gustado:)
ResponderEliminar¡Gamyr! Te ha quedado genial este relato, yo también creo que esa era la frase más difícil y te ha quedado genialisima, nada forzada, la historia tiene mucha vida e intriga y lo mejor de todo,el final es completamente inesperado :) ¡felicidades!
ResponderEliminarQue lindo lo que me decis Maria ! Gracias !
ResponderEliminarUn beso :)
Menuda frase que te tocó, yo hubiese renunciado, pero tú invocaste un sueño que seguramente hemos tenido todos los que escribimos (yo por lo menos), que nuestros personajes cobren vida, continúen con su historia como ciudadanos de nuestro mundo real (ya que reales son para nosotros). Esteban me confundió, lascivo, vale, envidia de hombres y temor de mujeres, pero nunca hubiese imaginado que fuese un sátiro, muy buena al dejarnos con la duda hasta el final.
ResponderEliminarY muy entretenida la historia, por supuesto. Besines
Muchisimas gracias Bess por tu comentario y bienvenida!
ResponderEliminarGABU ME DEJASTE CON LA BOCA ABIERTA , QUE CUENTO!!!!!! EXCELENTE ME ENCANTO, BESOS
ResponderEliminarGracias Diana :) Me alegro mucho.
ResponderEliminarBeso